
Este viernes y sábado tuvo lugar en el Hotel Castelar de la Ciudad de Buenos Aires el seminario Salud y Modelo productivo que, organizado por Fesprosa y Cicop contó con los aportes y la participación de médicos y organizaciones que luchan a diario contra la contaminación y la muerte que genera el modelo extractivista.
El seminario Salud y Modelo Productivo que tuvo lugar el viernes y sábado pasados comenzó con un minuto de silencio para los muertos y afectados por las inundaciones que la semana pasada dejó 6 muertos en la Ciudad de Buenos Aires y 51 oficialmente registrados en La Plata y sus alrededores mientras que hay decenas de desaparecidos y 350 mil personas siguen evacuadas. «Es la presencia del capitalismo destructor que solo produce ganancias y ciudades caóticas, ciudades de la muerte», dijo en la apertura Viviana García, presidenta de la Cicop.
Ante un auditorio colmado, García recordó que mientras que la Presidenta se abrazaba con los vecinos de Tolosa, se pagaban 3 mil millones de dólares a los organismos internacionales. «Necesitamos un cambio radical para transformar el Estado. Como los funcionarios no están, estamos nosotros, las organizaciones sindicales y las organizaciones sociales. La Cicop y la Fesprosa siempre trabajamos no solo pensando en mejorar las condiciones salariales sino por un sindicalismo ciudadano», agregó la profesional de la salud quien finalizó sus palabras de bienvenida diciendo: «Estuvimos, estamos y estaremos contra los agrotóxicos, la megaminería, la trata de personas, contra la violencia del sistema capitalista que destruye la vida. Otro mundo es posible y otra salud es posible».
Presentada por Matilde Ruderman, la siguiente oradora fue la Madre de Plaza de mayo Línea Fundadora, Nora Cortiñas. “No basta tener un título de médico sino está puesta toda la humanidad”, dijo Cortiñas con la claridad que la caracteriza. Además agregó que es inaceptable que en un país que produce alimento para el mundo, haya hambre y volvió a pedir que se reabran los archivos para poder juzgar a los responsables civiles de la dictadura, que se les devuelvan las tierras a los pueblos originarios, que se vaya Monsanto del país, que se deroguen de una vez por todas la Ley Antiterrorista y el Proyecto X, que no se pague la fraudulenta e ilegítima deuda externa, que haya castigo por la trata de personas y la pedofilia y que haya una democracia real y legítima, “algo que nosotras las Madres venimos pidiendo desde hace más de 30 años”.
La jornada continuó con la exposición de Damián Verzeñazzi de la Universidad Nacional de Rosario, Santa Fe, quien subrayó la necesidad de contar con la soberanía alimentaria para tener una vida sana y soberana. En ese sentido, agregó que para tener una buena alimentación se necesita una agricultura saludable.
Mientras que la Unión Europea prohibió la fumigación aérea con agrotóxicos, en Argentina año a año crece sideralmente la superficie fumigada a la vez que aumentan las muertes de bebés menores de 1 año, los abortos, los casos de cáncer y las malformaciones.
Delia Aissa, doctora en Biología de la Universidad Nacional de Río Cuarto hizo un claro resúmen de cómo afecta a la salud de la población el uso de agroquímicos. La especialista alertó que los organismos como la OMS sólo advierten sobre la toxicidad aguda de los agrotóxicos pero no sobre la crónica que produce enfermedades mortales pero a largo plazo.
El último orador del panel sobre el impacto sanitario de los transgénicos y los agrotóxicos fue el médico neonatólogo Medardo Ávila Vázquez, integrante de la organización Médicos de Pueblos Fumigados de Córdoba. El profesional contó que la lucha comenzó cuando empezaron a observar que luego de las fumigaciones se consumían más broncodilatadores y comenzaron a haber malformaciones en los nacimientos. Los datos recogidos por Medardo de la maternidad de Resistencia son más que elocuentes: las malformaciones pasaron de 46 en 1997 a 186 en 2008 cuando se extendió la superficie plantada de soja. “La mayoría de los niños menores de 1 año se mueren por malformaciones por culpa de nuestro modelo productivo”, dijo el médico.
La siguiente mesa fue sobre el impacto ambiental de la megaminería y el fracking y la resistencia social. Coordinado por Mario del Canto Peña de Sisap Chubut, No a la mina, el panel contó con la presencia de Marta Maffei, ex secretaria general de la CTERA y diputada nacional mandato cumplido; José Rigane, secretario Adjunto de la CTA, secretario General del Sindicato de Luz y Fuerza de Mar del Plata y de FeTERA y presidente del grupo MORENO y Ana Gloria González de Aproslar La Rioja, FESPROSA y Contramina.
Urbanización caótica, agua y residuos urbanos
Ernesto Salgado, del Foro Río de la Plata, aseguró que los grandes negociados, desde el Delta hasta Ensenada van a convertir la región más poblada del país en una gran laguna. Denunció al gran negocio inmobiliario de los últimos años como responsable de catástrofes como las ocurridas en La Plata y en la Ciudad de Buenos Aires. Advirtió que “es criminal poner subestaciones ni transformadores en los patios de las escuelas”. Agregó que se debe entender que instalar antenas de telefonía “enferma y mata”.
Salgado explicó la importancia del agua para la vida y la salud humana, en un mundo “donde 1.800 millones de personas viven en regiones que ya no tienen o no tendrán agua en los próximos años”. Destacó los graves problemas para la salud de los bonaerenses en cuanto a la provisión de agua potable y por la ausencia de cloacas y obras de saneamiento. “El Río de la Plata es el tercer río más contaminado del mundo, de ahí extraemos agua para 6 millones de personas”.
A su vez, Celestina Frutos, titular de Vecinos autoconvocados contra el Ceanse y el CARE, presentó un vídeo documental sobre el impacto de la contaminación en la región de González Catán. Recordó cómo fue el modelo de urbanización de la zona, como en casi todo el conurbano bonaerense vinculados a los negocios inmobiliarios.
El 60 por ciento de los habitantes de González Catán sufren los efectos de la contaminación por los residuos. Enfermedades respiratorias, dermatitis y diversos tipos de cáncer constituyen la evidencia del delito ambiental provocado por el CEAMSE, lo que ha sido probado en procesos judiciales impulsados por los Vecinos Autoconvocados, aseguró.
Dijo que el nuevo destino para la basura, denominado CARE (Centro Ambiental de Reconversión Energética), contra el que se ha presentado un recurso de amparo ante la Justicia, es más de lo mismo. “Si la población no se organiza contra ello continuaremos con el modelo de rellenos sanitarios rechazados mundialmente”, afirmó Frutos.
Políticas Alternativas
Pablo Micheli, destacó el aporte de la Cicop y de la Fesprosa a la CTA. Al referirse a la inundación de La Plata y la ciudad de Buenos Aires dijo que “la catástrofe es el capitalismo, este sistema no nos puede deparar más que tragedias y muertes”. Precisó que existe una continuidad entre Cromañón, el Once y la inundación de La Plata con la ley antiterrorista y de las ART.
“Vamos a seguir haciendo paros” aseguró Micheli, al tiempo que reafirmó la convocatoria a una Consulta Popular por la defensa de los bienes comunes, junto a otras organizaciones sociales.
Jorge Yabkowski, presidente de Fesprosa, al formularse la pregunta sobre cuál es la alternativa, dijo que “no hay una respuesta fácil, primero hay que plantarse en la crítica radical a lo existente, esto así no va, sino comienza el posibilismo, la política del mal menor”. “El caos urbano, el modelo sojero y la megaminería, como hemos visto, tienen vasos comunicantes”, indicó.
Destacó el compromiso ciudadano de de Cicop y Fesprosa, “no sólo con la democracia sindical sino con toda la sociedad”, reseñando la histori
a de las luchas de la entidad a lo largo de su historia. En el discurso de clausura, María Isabel del Pópolo, vicepresidenta de Fesprosa, abordó el drama de las poblaciones inundadas, “no se hace lo que se debe hacer”, puntualizó en cuanto a las responsabilidades. Agregó que “esto va contra la propia vida, nos están destruyendo la naturaleza; hay que identificar claramente a los enemigos y ponerles el rótulo que les corresponda”.
Del Pópolo advirtió que “no podemos combatir a la corrupción si nos permitimos pequeños actos de corrupción en nosotros mismos”.