Ciudad de Buenos Aires, 23 de diciembre de 2019
La asunción del nuevo gobierno se vio acompañada de una gran expectativa de la sociedad, abrumada por la grave situación económica social: 38% de pobreza, aumento de la desocupación, enorme peso de la deuda externa y caída del salario real de los trabajadores activos y pasivos.
Se esperaba y se espera que las primeras medidas sean el inicio de un camino para terminar con la pobreza, la indigencia y el hambre en la Argentina. En la ley aprobada conviven, a nuestro juicio, medidas que van en la dirección de la justicia fiscal junto a otras que perjudican a los trabajadores y benefician a los sectores concentrados de la economía.
Desde Fesprosa venimos luchando para encontrar respuestas positivas a la situación de las y los trabajadores de la salud. Somos parte del Movimiento por el Derecho a la Salud y la Multisectorial, que levantan la plataforma de 15 puntos para abordar la crisis sanitaria. La restitución del rango ministerial a Salud y Trabajo y la apertura de un dialogo sobre los despidos en el Posadas abren una expectativa positiva que esperamos se concrete en el futuro inmediato. Desde la doble perspectiva de representantes de los trabajadores y militantes del campo sanitario daremos una primera opinión sobre la ley aprobada en el Congreso de la Nación.
Trabajadorxs de Salud
Fesprosa reclama la paritaria nacional de salud, 82% móvil, derogación del impuesto al salario y el fin del trabajo precario. La ley autoriza a fijar por decreto aumentos de suma fija no remunerativos para los sectores de menores ingresos en el sector privado.
A su vez, se deroga la actual movilidad jubilatoria y se restablecen los aumentos por decreto para el régimen general, decisión que nos aleja del 82% móvil que reclamamos para lxs trabajadorxs de la salud.
En el capítulo de ganancias no hay cláusulas que deroguen ni moderen el impacto de este impuesto sobre los asalariados. Esto apoyado en el erróneo concepto de que son los trabajadores y jubilados de mayores ingresos y no los sectores concentrados los que tienen que solventar las mejoras de los sectores postergados. En varias provincias, los acuerdos paritarios logrados con la lucha fueron recortados por el creciente peso del impuesto al salario, destruyendo las escalas y afectando la economía de las familias. Su derogación fue y sigue siendo una bandera histórica de la Fesprosa.
Nos preocupa que esta ley pueda ser utilizada por muchos gobernadores como paraguas político para ajustar a los trabajadores en sus provincias.
Tomando por ejemplo el proyecto de ley de emergencia del Chaco vemos que en su capítulo de Emergencia administrativa y relación con el empleo público, da al ejecutivo la potestad de: reubicar, transferir, afectar y/o adscribir a los agentes públicos, celebrar convenios con empresas privadas para que agentes públicos presten servicios en las mismas, sustituir, cambiar y/o modificar funciones y tareas propias del cargo y cambiar el régimen horario. Además, congela las vacantes por 10 años, dejando de este modo sin solución la situación de lxs más de 3000 precarizadxs en Salud.
EMERGENCIA SANITARIA
En otro orden, en el capítulo del proyecto de ley que establece la emergencia sanitaria podemos observar que:
a) No se deroga la CUS, principal política del gobierno neoliberal de Cambiemos. Se sostiene en cambio la continuidad del programa CUS-Medicamentos, sin apoyos para la Producción Publica.
b) No se destinan partidas de emergencia para los 7700 efectores del sistema estatal de salud, la principal arma para atender a los sectores más vulnerables. Tampoco se prioriza la recuperación del recurso humano, verdadera emergencia sanitaria, ya que sin ese pilar indispensable se abren las puertas para la tercerización de servicios básicos de salud (aun en la APS).
c) Se crea un Consejo Consultivo para la emergencia sin participación de lxs trabajadorxs de la salud.
d) Se reimplanta, sin un amplio debate en el campo sanitario, el Plan Federal de Salud, política que, a nuestro juicio, no pudo resolver en su momento las graves falencias del sistema sanitario argentino. Como lo señala la Multisectorial, es imprescindible abrir un debate nacional sobre el futuro del sistema sanitario.
Fesprosa realiza estos señalamientos basada en la experiencia colectiva de decenas de miles de trabajadores y trabajadoras de la salud organizados y movilizados en todo el país. Estamos dispuestos a dar nuestro aporte a este debate desde una posición positiva y de dialogo.
Los poderes públicos tienen la palabra.
CONSEJO EJECUTIVO NACIONAL DE FESPROSA
